#conchispeza: «Bótate de la cama»
Correr AM no es fácil, pero nuestra creativa y super AM columnista se las ingenió con este concepto para vencer la flojera matinal y entrenar cuando la mayoría duerme.
por Sole Hott
Como corredora AM debo asumir dos cosas, me encanta correr en la mañana por un tema físico y mental, pero a veces la motivación para salir se ve afectada por agentes externos como «me debo horas de sueños», «mi cuerpo no lo pide hoy» o «mis almohadas no me lo están haciendo fácil». No es que nos despertemos a las 6.30 de la mañana con la mejor cara y toda la pila del mundo, ¡NOT! hay que motivarse. Ahora en verano no cuesta tanto y de hecho es casi más fácil porque está la presión del calor, mientras más temprano mejor, si no te arriesgas a correr en modo sauna.
Durante el invierno mi relación con las sábanas se intensificó y la idea de salir de la casa a oscuras me perturbaba: «¡¡por qué si el resto duerme a esta hora!!». Pero lo lograba, caminaba en calidad de zombie al metro, y ahí estaba 7 AM lista para el fartlek. ¿Cuál es el secreto? «Bótate de la cama»…literal. Es la mejor técnica, rápida y 100% efectiva. Suena la alarma, vuelve a sonar 10 minutos después, y antes de llegar a la tercera tú tomas la decisión: te acercas al borde de la cama y simplemente ruedas en dirección al suelo. Reconozco que al principio me miraron raro, porque sí algo duele, pero a esa hora y en calidad de bulto con sueño…el dolor se olvida. Y después del aterrizaje forzoso no te queda otra que pararte, y si ya estás parada, vístete y sal a correr, fin.
Ahora es una técnica muy recurrente entre las chiquillas de mi equipo de entrenamiento, a la que se le han agregado otras prácticas incentivadoras de trote matutino que involucran más personas, ideal para las que corremos en grupo: troteyuno. Este consiste en un desayuno post entrenamiento. ¿Cómo funciona? Tú corres de 7 kilómetros hacia arriba y luego buscas un café cerca y te sirves una cosita. Algo que por lo general termina siendo tostadas con palta y café con leche. Tampoco es que nos demos un desayuno continental tipo hotel en vacaciones ¡NOT! Es a modo de premio y por eso tiene requisito de kilómetros.
Entonces, tenemos el «bótate de la cama» y el «troteyuno». Ambas funcionan y pueden combinarse, la tercera técnica ya es «irse a la psicológica»: agenda a tu partner de trote con hora y día, si ya quedaron te sentirás mal y no vas. Es como dejar plantado a alguien. Y no se te ocurra poner en duda el ir «¿Y si seguimos durmiendo?», la respuesta a ese mensaje debe ser «¡Bótate de la cama!». Ahora, si llegaras a no ir porque de verdad respondiste «voy saliendo», pero te estabas quedando dormida…tú te auto castigas y corres sola PM.
Teniendo esto en cuenta falta un detalle muy importante que aprendí de mis amigas Pepa Bello y Tete Onetto…el repaso. Al correr temprano a veces te quedan unos minutos para repasar el sueño, con esto ya definitivamente amarás el haber corrido temprano.Estos incentivos también se pueden aplicar a quienes corren por las tardes o en la noche, pero quizás el troteyuno tendría que cambiar el menú y el clásico «voy a recostarme aquí un ratito» post pega tiene su «Botáte de la cama» versión vespertina: «evite recostarse en el sillón, cama o algo que se le parezca» y «no prenda el televisor». Y para qué hablar de «el repaso», en la tarde sería pasar directamente a la cama y hasta el otro día.
Los que corren saben que la motivación está, pero a veces necesitamos algo de chispeza para conectar pies y cabeza, y hacer eso que tanto nos gusta…sumar kilómetros.
Sole Hott (@solehott) es periodista, directora de revista Seventeen y una corredora AM y PM con alma de piña.