La primera gran diferencia de las nuevas Floatride Flexweave de Reebok, más allá del diseño, de es que a simple vista se ven diferentes y en una forma positiva. No solo han cambiado las combinaciones de colores, sino que además son más bonitas. Algo que aunque no se asuma, tiene importancia.
Los cambios de esta zapatilla se asumen a partir de su versión original, es decir, la han mejorado. Según sus creadores, resulta ideal para pisada neutra y corredores de largas distancias. También se acomoda perfectamente para media maratón, 10k, e incluso le di su oportunidad en la pista.
Buena amortiguación, agarre justo, cómoda, muy ligera y con una parte superior transpirable que se agradece al sumar minutos. Y esto se debe precisamente al upper, Flexweave, que le da el nombre al modelo.
Si bien con la FloatRide anterior (Floatride, las nuevas zapatillas de Reebok) sentía el pie algo presionado, en este nuevo modelo no lo sentí así, muy por el contrario, el pise bien firme, pero muy flexible.
Y es que tanto la mediasuela como la suela la hacen reducir el impacto al pisar. Al ser ultra ligera, otorga esa sensación al correr, pero sin sentir que es un calzado ‘débil’ por ser liviano. Y se siente suave desde el talón a la punta del pie. Además, el borde exterior de EVA cumple con darle la estabilidad del pie.
Si buscan una zapatilla de uso diario, que se sienta liviana, pero que al mismo tiempo de amortiguación y rapidez de dirección, la Reebok Floatride Run Flexweave es una excelente opción. E insistiendo en el diseño, son lindas, por lo que perfectamente pueden pasar de la pista o el largo del fin de semana, a tu día a día.
Más información en http://www.reebokchile.com/floatride/