Las bajas temperaturas, el aislamiento de la cuarentena y la necesidad de mantener nuestras defensas más fuertes que nunca, hacen de nuestra dieta en invierno un ítem fundamental. Para saber qué súper-alimentos no pueden faltar en tus comidas conversamos con Alejandra Alarcón, nutricionista del Programa de Obesidad y Diabetes de Clínica Universidad de los Andes.
Acá los que tienen que estar sí o sí en tu lista de compras para tu dieta de invierno:
Cítricos. Como limones, naranjas, pomelos o mandarinas. Son ricos en vitamina C, lo que estimula la producción de glóbulos blancos, clave para combatir infecciones. Es muy importante considerar su consumo a diario.
Almendras. Ricas en calcio y vitamina E, son ideales para tener un sistema inmunológico saludable. Su forma de consumo se ha diversificado y podemos obtener sus beneficios a través de bebidas enteras, tostadas o como parte de una ensalada o guiso de verduras.
Brócoli. Aporta numerosos minerales y vitaminas, entre las que destacan la A, C y E, además de antioxidantes y fibra. La mejor manera de obtener todos sus nutrientes es cocerlo lo mínimo posible o, mucho mejor, comerlo crudo en ensalada o jugos.
Chocolate negro: Cuanto más cacao tenga, es más rico en antioxidantes y en fibra, una característica muy buena para la salud cardiovascular y para el sistema nervioso central. Se puede consumir disuelto el agua o agregado por ejemplo al yogurt.
Espinaca y acelga. Lo mejor es consumirlas a diario. Son altamente alcalinizantes y aportan mucha clorofila, lo que ayuda a depurar el organismo.
Legumbres. Ricas en hierro y minerales como el calcio o el magnesio, son una fuente de proteína de valor biológico, aunque no es tan elevado como el de la carne. Pero, a diferencia de la carne, aporta muy poca grasa y mucha fibra.
Jengibre. Sus fortalezas se deben sobre todo a que es rico en aceites volátiles. Aporta vitaminas (especialmente vitamina B6 y vitamina C) y minerales (calcio, magnesio, fósforo y potasio), y además sirve para combatir el mal aliento.
Ajo. Es un eficaz anti-bacteriano y anti-viral y anti-fúngico, ideal para consumirlo como condimento en todo tipo de platos.