Mis primeras zapatillas para correr fueron las Pegasus 30, y desde ahí siempre fueron mi primera opción. Alguna que otra vez corrí con unas Flyknit, también de Nike, pero siempre volví a las Pegasus. En pocas palabras lo que me ha gustado siempre es que son blandas, pero no al extremo, afirman bien el tobillo y el pie. Funcionan en distintos terrenos y son ideales para entrenar y correr largas distancias.

Algunos modelos me gustaron más que otros, pero definitivamente las 31 no fueron la opción. Con las 32 y las 33 me volví a encantar y con las llegada de las 34 olvidé todas las versiones anteriores. Son definitivamente mis favoritas. Son la mezcla perfecta de mis favoritas: 30 y 32, pero mejoradas.Ya llevo varias meses con las Pegasus 34 y cuando he vuelto a usar otra se nota la diferencia, es literalmente como bajar de piso y se sienten más duras las antiguas.

En la parte técnica, en esta nueva versión de Nike el material que predomina en la mediasuela es Cushion ST, lo que le da una gran capacidad de amortiguación y alta memoria elástica, dando como resultado una zapatilla suave y compacta. Y en su interior tiene una cámara de aire tipo Zoom Air de mayor compresión. Las líneas del costado te demuestran gráficamente los niveles de la mediasuela y aunque pudiera parecer que el pie va a quedar levantado en la parte de atrás, no es así, de hecho queda perfectamente metido y bien sujeto a la base.

En cuanto a la suela es prácticamente igual a la anteriores y el diseño se mantiene, que ya tenía mejoras y buen agarre. Tiene goma reciclada en la mayor parte de la suela, lo que la hace más resistente. Y adelante tiene material más blando para darle mayor tracción a la pisada.

En la zona Upper la Nike Zoom Pegasus 34 está confeccionada con Flymesh y ausencia total de costuras. Un hilo ligero, pero que ajusta y sujeta. Incluso dicen que esto hace que se más rápido sacárselas y ponérselas. También incluye la tecnología Flywire que se aprecia en la parte de los cordones y ojales, por lo que es muy fácil darles el ajuste perfecto, y así el pie no se mueve. La malla es tupida, pero en la parte de los dedos se expande lo que le da máxima transpirabilidad.

Y en la parte trasera, está el no visible Heel Counter, que estabiliza el talón al impactar el suelo. Además, tiene 19 tiras reflectantes horizontales para el ítem visibilidad en condiciones de poca luz.

Con la Pegasus, para mí, es amor a primera vista, las amas o las odias, aunque creo que quien a probado una no volverá a usar otras. Y esa impresión de comodidad máxima que te dan al verlas, es real e inmediata al calzarlas. Nike no se equivoca con las Nike Air Zoom Pegasus, la amortiguación se siente al segundo y se ajustan al pie como si fueran tus zapatillas de siempre.

En este caso, con solo unos metros te das cuenta que hay más amortiguación que en los modelos anteriores, y a los pocos minutos son parte de tu pie. Si creías que no podían mejorar tus favoritas, con las Nike Air Zoom Pegasus 34, lo han logrado. Las he probado tanto en pista y en largos, senderos y cemento, la comodidad, estabilidad y suavidad, se mantienen.

Si buscas una zapatilla para entrenar y correr a diario, que sea amortiguada y casi para cualquier superficie (no trail claramente), es perfecta. Es liviana y la recomiendan para pisada neutra. Si ya eres team Pegasus, estas te van a trastornar. Si no las has probado nunca, precaución, son adictivas.